Las escaras, también conocidas como úlceras por presión, son lesiones en la piel causadas por una presión prolongada sobre una área específica del cuerpo.
Estas suelen afectar a personas con movilidad reducida, como pacientes encamados o en silla de ruedas. Un adecuado cuidado de la piel es esencial para prevenir y tratar estas lesiones, mejorando la calidad de vida del paciente.

Causas y Factores de Riesgo
Las escaras se desarrollan cuando la presión constante interrumpe el flujo sanguíneo en la piel y los tejidos subyacentes. Algunos factores de riesgo incluyen:
- Inmovilidad prolongada
- Falta de higiene y cuidado de la piel
- Desnutrición y deshidratación
- Enfermedades crónicas como diabetes o problemas circulatorios
- Uso inadecuado de dispositivos médicos como sondas o vendajes
Prevención de las Escaras
Para evitar la aparición de escaras, es fundamental implementar una serie de medidas preventivas:
- Cambio de Posición Frecuente: Mover al paciente cada 2 horas para reducir la presión en áreas sensibles.
- Uso de Colchones y Cojines Especiales: Los colchones antiescaras y cojines de espuma o gel ayudan a disminuir la presión en la piel.
- Higiene y Cuidado de la Piel: Mantener la piel limpia y seca, utilizando jabones suaves e hidratantes para evitar irritaciones.
- Buena Alimentación e Hidratación: Una dieta rica en proteínas, vitaminas y minerales fortalece la piel y mejora su capacidad de cicatrización.
- Ejercicios Pasivos y Activos: Fomentar movimientos suaves para estimular la circulación sanguínea.
Tratamiento de las Escaras

Si una escara ya se ha desarrollado, es necesario seguir un tratamiento adecuado según su gravedad:
- Fase Inicial (Enrojecimiento de la Piel): Mantener la piel seca, aplicar cremas protectoras y evitar la presión en la zona afectada.
- Fase Intermedia (Herida Superficial o Ampolla): Limpieza con soluciones antisépticas y uso de apósitos especiales para favorecer la cicatrización.
- Fase Avanzada (Úlcera Profunda o Necrosis): Requiere atención médica, desbridamiento del tejido muerto y posible tratamiento con antibióticos para prevenir infecciones.
Importancia del Seguimiento Médico
Consultar a un profesional de la salud es clave para garantizar un tratamiento adecuado y evitar complicaciones graves. Un seguimiento médico regular ayuda a detectar cualquier problema a tiempo y a ajustar el plan de cuidados según las necesidades del paciente.
El cuidado de las escaras en la piel requiere una combinación de prevención, higiene y tratamiento oportuno. Implementar medidas adecuadas no solo ayuda a evitar la aparición de estas lesiones, sino que también mejora la calidad de vida de los pacientes.